miércoles, 25 de febrero de 2009

¿Eres el escanciador del vinatero, o el enemigo del sobrio,
o eres tú el que destruye toda cosa que edifico?
En ti se disuelve el alma, contigo se mezcla;
Estimaré el alma porqué tiene un aroma de ti.
Cada gota de sangre que de mi procede
le dice a tu polvo:
"Soy del mismo color que tu amor,
soy el compañero de tu afecto"
En la casa de agua y barro, este corazón
se siente desolado sin ti;
Oh Amado, penetra en la casa o la abandonaré.

Jalaliddin Rumi

2 comentarios:

Anónimo dijo...

qué Eva!!

Las imágenes referidas al amor y al vino son comunes a todos los poetas místicos persas. Los goces terrenales son signos de beatitud espiritual y estados contemplativos.

Fueron utilizadas por poetas sufíes con la intención de defenderse de los ataques de la incomprensión de los que se toman las cosas en sentido literal.

No siempre tienen porque coincidir en todos los textos, les gusta jugar con la ambigüedad.

En este caso:

El " escanciador": La Realidad, que le gusta manifestarse en todas las formas reveladas, lo que Es.

Lo del "barro"puede ser como el botijo que contiene el agua, puede hacer referencia a las creencias, "las formas", que no son el agua que contiene.

Eva dijo...

No veas!!!!

Que Chus!!!

tú sí que sabes!!!

ya me gustan estos poemas, pero de tus labios se abre toda otra dimensión que...

en fin, me encanta.