jueves, 11 de junio de 2009

Iluminación


La palabra iluminación suscita la idea de un logro sobrehumano y al ego le gusta que sea así, pero no es más que tu estado natural en el que sientes la unidad con el Ser. Es un estado de conexión con algo incomensurable e indestructible, con algo que es esencialmente tú, y sin embargo es mucho mayor que tú. Es encontrar tu verdadera naturaleza más allá del nombre y la forma. La incapacidad de sentir esta conexión crea la ilusión de que estás separado de ti mismo y del mundo que te rodea. Entonces te percibes, consciente o inconscientemente, como un fragmento aislado. Surge miedo y los conflictos internos y externos pasan a ser la norma.

Me gusta mucho, por su sencillez, la definición que Buda dio de la iluminación. Dijo que "es el final del sufrimiento". No hay nada de sobrehumano en esta definición, aunque, por supuesto es incompleta. Sólo te dice lo que la iluminación no es:no más sufrimiento. Pero ¿qué queda cuando ya no hay sufrimiento? El Buda guarda silencio respecto a eso, y su silencio implica que tendrás que averiguarlo por ti mismo. El emplea una definición negativa para que la mente no pueda convertirla en una creencia o hacer de ella un logro sobrehumano. A pesar de esta precaución, la mayoría de los budistas siguen creyendo que la iluminación es para Buda y no para ellos, al menos no en esta encarnación.

E. Tolle

1 comentario:

carmen dijo...

Ayer mismo leí estos párrafos!!!!
Jajajaja!!!!
Miles de besos